Aunando emociones tan viscerales como la protección, el miedo o la falta de humanidad, Naughty Dog nos deja otra obra maestra. Uno de los estudios más poderosos de la actualidad vuelve a mostrar su brillante estado de forma con un viaje inolvidable protagonizado por dos héroes de leyenda. Acción y terror van de la mano en este firme candidato a Juego del Año para el vibrante 2013. ¿Cómo transmitir lo que supone este título? De forma sencilla: si te gustan los videojuegos, The Last of Us es para ti. Los chicos de Naughty Dog tienen un don. Su talento sobrepasa cualquier cota imaginable para todo lo que tiene que ver con crear experiencias estéticas de enorme personalidad y gran gancho para el espectador, pero lo que de verdad les diferencia del resto es su talento para crear un asombroso toque cinematográfico en todos sus productos. Es precisamente sobre ese pilar sobre el que se ha construido la experiencia de The Last of Us, una columna que además está acompañada por un telón de fondo post-apocalíptico que tanto gusta al aficionado del siglo XXI.

Sin embargo reducir a esos ganchos el atractivo del videojuego que nos ocupa sería criminal, y es que sus virtudes son tan amplias y han sido expuestas de una manera tan grosera durante la fase promocional del programa, que sería de una alarmante cortedad de miras el no haberlas percibido. Hablamos de una historia que ya desde la distancia parecía contada con el estilo que sólo tienen los super-clases de la narrativa, de unos protagonistas con carisma y de una experiencia jugable que desde el día de su anuncio prometía grandes resultados. Todo eso está presente en el título de Naughty Dog, pero también muchas cosas más. Así The Last of Us es un brillante compendio de contenidos que aglutina casi todo lo bueno de lo que han ofrecido los videojuegos de acción/aventuras en esta generación, y que además lo mezcla con una forma novedosa de ver el género del miedo. Se trata pues de un producto absolutamente recomendable y realmente completo que aúna un muy interesante multijugador con su verdadero gancho: una campaña individual asombrosa, de máxima intensidad y a caballo entre géneros tan dispares como la acción, el terror o las aventuras. Se consolida así un lanzamiento impresionante que, por si fuera poco, tiene el venerable ánimo de aportar un revestimiento moderno y de decidida evolución para un género tan clásico como el Survival Horror. La historia de The Last of Us es uno de los grandes reclamos del videojuego, y como siempre también se cuenta entre las habituales virtudes de las obras de Naughty Dog. El equipo californiano vuelve a brindarnos otra cumbre narrativa dentro del mundillo de los videojuegos, y al igual que con la serie Uncharted, sublima una forma de contar historias que tiene mucho de cinematográfico pero que se adapta como un guante al entretenimiento interactivo. En esta ocasión cambian el telón de fondo de las exóticos aventuras de Nathan Drake por un planeta tierra que fue arrasado hace dos décadas por un misterioso virus que convirtió a la mayoría de su población en monstruosas criaturas, y que ha dejado al resto malviviendo y tratando de perdurar con serias dificultades durante todo este tiempo.

El guión se desarrolla con calma, sabedor de que las grandes historias necesitan de un tiempo para desplegarse adecuadamente. Los alérgicos a los argumentos que no exponen todas sus cartas desde el minuto cero deben evitar el título que nos ocupa, ya que la historia de Joel y Ellie crece con lentitud pero siempre con enorme interés. En nuestro análisis como siempre en estos casos, pero más aún en éste, evitaremos dar detalle alguno sobre los entresijos del guión del programa, y únicamente diremos que desde su maravilloso prólogo nos atrapa con gancho a pesar de su exposición pausada pero de cuidado tempo, y que las secuencias cinemáticas cuentan con un acabado del todo impecable: con ese estilo de avanzadísima película de animación de estilo realista que tan buenos resultados brinda.

Lo que sí podemos contar sin temor a caer en spoiler alguno es que el Modo Historia está dividido en varios capítulos en los que los protagonistas son siempre Joel y Ellie: dos supervivientes del apocalipsis del título. El primero es el auténtico líder de lo que se nos cuenta desde el minuto cero, pero no tardaremos demasiado tiempo en conocer a la jovencita que pondrá patas arriba nuestro mundo. Cuando conocemos al héroe, éste se gana la vida de forma poco honrosa, lidiando con la peor escoria de una raza humana que subsisten de malas maneras entre las ruinas de las antaño majestuosas ciudades de la Tierra. En un momento determinado de la historia habrá un giro importante, y tras conocer a la pequeña de apenas catorce años tendremos por fin un objetivo en nuestra vida. Una meta que nos llevará a embarcarnos en un mastodóntico viaje por el centro de América.

El videojuego tiene mucho de iconos de la cultura popular fácilmente reconocibles en cuanto a la forma de contar la historia. Por ejemplo esinnegablee que la serie de ABC The Walking Dead, basada en la novela gráfica del mismo nombre, ha sido una influencia importante, pero todavía en mayor medida ha estado presente en la mente de los desarrolladores The Road. La novela de Cormac McCarthy, y la respetuosa película homónima, comparten con el videojuego ese tono pesimista, esa historia de protección con un punto paterno-filial y también el hecho de que los humanos son el peor y más aterrador y cruel de los enemigos.